
Por Alejandro Barañano
En recientes entregas de este mismo espacio, advertimos que la explotación minera, principalmente la realizada a cielo abierto, representa una amenaza para el medio natural y para las personas que habitan en las regiones donde se realiza, y de hecho existen muchos ejemplos que documentan los efectos de la degradación generada por los materiales de desecho y los químicos que se utilizan, y que son altamente nocivos para la biodiversidad y para la salud humana.
La mayoría de estos químicos terminan depositados en los mantos acuíferos contaminando el agua que es extraída y utilizada posteriormente por poblados y ciudades, alterando por ende gravemente las condiciones de salud de dichas poblaciones.
Pues bien, el reconocido abogado Arturo Rubio Ruíz, dio a conocer que recientemente un Juez Federal de la Ciudad de México le concedió un Amparo a la empresa Desarrollos Zapal, S.A. de C.V, propietaria del proyecto minero “Los Cardones” en la Sierra La Laguna, ordenando con ello al Ayuntamiento de La Paz reconocer el permiso de cambio de uso de suelo.
No obstante ello, la autoridad municipal que encabeza Armando Martínez Vega, ya presentó un Recurso de Revisión, pues considera que fue un acto irregular de dicho Juez.
Junto con ello diversas organizaciones civiles decidieron unirse al Ayuntamiento de La Paz y apoyar, en caso de que sea rechazado dicho recurso, ellos presentar otros más para detener a la malévola compañía.
Bien vale la pena recordar que fue el pasado 31 de marzo, cuando el Poder Judicial de la Federación informó que el Juzgado Tercero de Distrito en Baja California Sur, dictó su fallo y declaró como improcedente el recurso de amparo interpuesto por Desarrollos Zapal, SA de CV, quienes a producto de gallina querían hacer valer el documento que “supuestamente” avalaba el cambio de uso de suelo a su favor de la empresa minera “Los Cardones”, y el cual habrían firmado los regidores de la pasada administración municipal de La Paz.
Pero independientemente del sesgo político de este asunto, hay que recordar que el polvo que generará la minería a cielo abierto en la Baja California Sur sería llevado hacia toda la geografía peninsular y muchas de sus ciudades por la acción del viento.
La advertencia ha sido señalada desde años atrás por especialistas y es retomada ahora por el Frente Ciudadano en Defensa del Agua y la Vida, toda vez que la familia Salinas Pliego se dice ganó un amparo que obligaría a la apertura de la mina Los Cardones.
Ahora bien, en una investigación realizada por el Colegio de Ingenieros Civiles de Baja California Sur, denominado “Estudio relativo al movimiento de polvo -residuo de mina- debido a la acción del viento”, se llegó las siguientes conclusiones, y con las que se sostiene técnicamente que no es recomendable dicha mina en la entidad.
Primero, porque el viento puede levantar las partículas de polvo considerando la velocidad de viento desde los 20 kilómetros por hora, y porque el movimiento del polvo inicia desde que se construyen los caminos en el área de la mina, intensificándose gradualmente conforme se hacen las extracciones de roca y más todavía con los desechos del polvo una vez realizado el proceso de retiro del metal.
Segundo, que en caso de la presencia de un huracán las cantidades de polvo serán muy grandes, ya que no se detendrá el movimiento del polvo hasta que la velocidad sea menor a 20 kilómetros por hora, y que este material cubrirá la superficie del terreno en todas direcciones alrededor del proyecto minero, ya que en una hora de viento tendría un alcance de 170 kilómetros.
Tercero, porque el desplazamiento del polvo es inevitable ya que el material suelto y seco está tanto en el área de excavaciones como en el de desechos, por lo que el material suelto rellenará áreas muy amplias afectando la flora del lugar, no solo del área destinada a la mina sino de un área alrededor, que incluirá sin duda los municipio de La Paz y Los Cabos, llegando al Golfo de California y océano Pacifico.
Es por demás obvio decir que como resultado del punto anterior se afectará también la fauna silvestre, disminuyendo esta en cantidad y variedad, y por ende se reducirá la flora natural pues se propicia una mayor erosión, ya que ésta sostiene la delgada capa de tierra vegetal superficial, iniciándose con ello un proceso de desertificación al quedar la roca limpia expuesta a la intemperie.
Así que en conclusión: La instalación de una mina a cielo abierto como podría ser la de Los Cardones no es recomendable ya que afecta la flora, fauna, el acuífero y la vida humana del Estado de Baja California Sur, por lo que está en manos de la autoridad y de la sociedad en general que esto no se dé; y mientras tanto quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .